La gran mayoría de las malformaciones congénitas se deben al cierre defectuoso del tubo neuronal, durante la cuarta semana de gestación, estas anomalías afectan a los tejidos que recubren la médula: meninges, arcos vertebrales, músculos y piel.
– Espina bífida oculta: Es el defecto en el arco vertebral (arco neural), como consecuencia de la falta del crecimiento normal y fusión de los arcos; ocurre en las vértebras L5 y sacro.
– Meningomielocele: anomalía que se suele acompañar de déficit neurológico notable inferior a nivel del saco saliente; lo que altera el desarrollo de fibras nerviosas.
– Mieloquisis: Es una espina bífida donde la médula espinal, en el área afectada, se abre debido a que no se fusionan los pliegues neurales. Se debe a un DIN causado por el crecimiento excesivo de la placa neural.
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– Espina bífida oculta: Es el defecto en el arco vertebral (arco neural), como consecuencia de la falta del crecimiento normal y fusión de los arcos; ocurre en las vértebras L5 y sacro.
– Seno dérmico raquídeo: Hoyuelo en la piel posterior del plano medio de la región sacra.
– Espina bífida quística: Es la espina bífida grave. Incluye protuación de la médula espinal, meninges o ambas a través del defecto de los arcos braquiales. Presenta saco en forma de quiste.
– Espina bífida con meningocele: Cuando el saco contiene meninges y líquidos cefalorraquídeos.
– Meningomielocele: anomalía que se suele acompañar de déficit neurológico notable inferior a nivel del saco saliente; lo que altera el desarrollo de fibras nerviosas.
– Mieloquisis: Es una espina bífida donde la médula espinal, en el área afectada, se abre debido a que no se fusionan los pliegues neurales. Se debe a un DIN causado por el crecimiento excesivo de la placa neural.
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